El Profeta Ismael tuvo un papel importante en la reconstrucción de la Casa Sagrada y en el Renacimiento del monoteísmo
El profeta Ismael fue hijo del profeta Abraham y de Agar, hermano del profeta Isaac, antepasado de los árabes (ismaelitas) y predecesor del profeta Muhammad (que la paz sea con todos ellos).
Aunque el cristianismo y el Islam coinciden en honrar al Profeta Ismael, el tratamiento cristiano del Profeta Ismael en la Biblia le discrimina a él y a sus descendientes en favor del Profeta Isaac y de sus descendientes.
A diferencia de la actitud bíblica, el Islam no discrimina a ningún profeta ni descendiente.
El Profeta Ismael en el Cristianismo
En la Biblia, el cristianismo honra al Profeta Ismael, como leemos acerca de la bendición de Dios a Ismael y sus descendientes. Sin embargo, ese honor es contradicho por la flagrante discriminación hacia él y sus descendientes en favor de su hermano, el profeta Isaac, y sus descendientes.
La Biblia nos dice que el pacto que Dios hizo con el Profeta Abraham fue transmitido a Isaac y a sus descendientes, excluyendo a Ismael y a sus descendientes.
Por ejemplo, leemos:
Y dijo Abraham a Dios: Ojalá Ismael viva delante de ti. Respondió Dios: Ciertamente Sara tu mujer te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y confirmaré mi pacto con él como pacto perpetuo para sus descendientes después de él. Y en cuanto a Ismael, también te he oído; he aquí que le bendeciré, y le haré fructificar y multiplicar mucho en gran manera; doce príncipes engendrará, y haré de él una gran nación. Mas yo estableceré mi pacto con Isaac, el que Sara te dará a luz por este tiempo el año que viene. (Génesis 17: 18-21)
También leemos:
Y le dijo: Agar, sierva de Sarai, ¿de dónde vienes tú, y a dónde vas? Y ella respondió: Huyo de delante de Sarai mi señora. Y le dijo el ángel de Jehová: Vuélvete a tu señora, y ponte sumisa bajo su mano. Le dijo también el ángel de Jehová: Multiplicaré tanto tu descendencia, que no podrá ser contada a causa de la multitud. Además le dijo el ángel de Jehová: He aquí que has concebido, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Ismael, porque Jehová ha oído tu aflicción. Y él será hombre fiero; su mano será contra todos, y la mano de todos contra él, y delante de todos sus hermanos habitará. (Génesis 16: 8-12)
El Honor del profeta Ismael en el Islam
El Islam honra y elogia al Profeta Ismael. Por ejemplo, el Corán nos dice que el Profeta Ismael fue uno de los profetas que fueron preferidos a los mundos. Leemos:
E Ismail, Alyasa´a, Yunus y Lut. A todos los favorecimos por encima de los mundos. (Al-An’am 6:86)
El Corán también nos dice que el Profeta Ismael fue de las élite de los profetas. Leemos:
Y recuerda a Ismail, Alyasa´a y a Dhul Kifl, todos predilectos. (Saad 38:48)
El Corán afirma que el Profeta Ismael fue el paciente a quien Dios admitió en Su misericordia. Leemos:
E Ismail, Idris y Dhul-Kifl, todos de la gente de constancia. Los pusimos bajo Nuestra misericordia, es cierto que eran de los justos. (Al-Anbiyaa’ 21: 85-86)
El Corán también menciona que Ismael era un profeta y un mensajero fiel a su promesa y con quien Dios estaba complacido. Leemos:
Y recuerda en el Libro a Ismail, él fue cumplidor de la promesa y fue mensajero y profeta. Mandaba a su gente la oración y la purificación de la riqueza y era satisfactorio para su Señor. (Maryam 19: 54-55)
El papel de Ismael en la reconstrucción de la Casa Sagrada y en el renacimiento del monoteísmo
El Corán nos dice que el Profeta Abraham, así como su esposa egipcia, Hagar, y su primogénito, el profeta Ismael, se trasladaron al Valle de Bakkah, más tarde conocido como “Makkah Al-Mukarramah”.
El Corán también nos dice que al Profeta Abraham se le ordenó reconstruir el Santo Santuario después de su demolición por el Gran Diluvio. Era la primera casa hecha para que la gente adorara a Dios. Había sido construida por ángeles y luego fue reconstruida por Abraham e Ismael. En el Corán, leemos:
Es cierto que la primera casa que fue erigida para los hombres fue la de Bakka, bendita y guía para todos los mundos. (Aal `Imran 3:96)
Sobre el mandato de reconstruir el Santo Santuario, revivir el monoteísmo y decretar los ritos de la peregrinación, leemos:
Y cuando preparamos para Ibrahim el lugar de la Casa: No asocies nada conmigo, purifica Mi casa para los que dan vueltas alrededor de ella y los que rezan en pie, inclinados y postrados. Y llama a la gente a la Peregrinación, que vengan a ti a pie o sobre cualquier montura, que vengan desde cualquier remoto camino. (Al-Hajj 22: 26-27)
Ismael participó en la reconstrucción del Santo Santuario, reviviendo el monoteísmo y la súplica a Dios para asegurar el Valle de Bakkah, proveer a su pueblo de frutos, hacer que sus descendientes engendraran una descendencia recta y enviarles al Profeta Muhammad como profeta y mensajero. Sobre eso, leemos:
Y cuando hicimos de la Casa un centro de reunión y un lugar seguro para los hombres que adoptaron la estación de Ibrahim*. Habíamos pactado con Ibrahim e Ismail que mantuvieran pura Mi casa para los que cumplieran las vueltas en torno a ella, los que allí permanecieran y los que se inclinaran y postraran. Y cuando dijo Ibrahim: ¡Señor mío! Haz de este territorio un lugar seguro y provee de frutos a aquéllos de sus habitantes que crean en Allah y en el Último Día. Dijo: Y al que se niegue a creer, lo dejaré disfrutar un tiempo y luego lo llevaré a rastras al castigo del Fuego. ¡Qué mal fin! Y cuando Ibrahim e Ismail erigieron los fundamentos de la Casa: ¡Señor, acéptanoslo! Tu eres Quien oye, Quien sabe. ¡Señor nuestro! Haz que estemos sometidos a Ti y haz de nuestra descendencia una comunidad sometida a Ti. Enséñanos a cumplir nuestros ritos de adoración y vuélvete a nosotros, realmente Tú eres Quien se vuelve en favor del siervo, el Compasivo. ¡Señor nuestro! Envíales un mensajero que sea uno de ellos, para que les recite Tus aleyas (signos), les enseñe el Libro, la Sabiduría y los purifique. Es cierto que Tú eres el Poderoso, el Sabio. (Al-Baqarah 2: 125-129)
También leemos:
¡Señor nuestro! He hecho habitar a parte de mi descendencia en un valle en el que no hay cereales, junto a tu Casa Inviolable; para que, Señor, establezcan la Oración; así pues haz que los corazones de la gente se vuelquen hacia ellos y provéeles de frutos para que puedan agradecer. (Ibrahim 14:37)
El Profeta Ismael ofrecido como sacrificio
El Corán indica que a quien se ordenó sacrificar al Profeta Abraham fue a Ismael. Fue Ismael también quien fue rescatado con un gran obsequio antes del sacrificio y después de la sumisión al mandato de Dios. En el Corán, leemos:
Y lo rescatamos poniendo en su lugar una magnífica ofrenda Y dejamos su memoria para la posteridad. Paz para lbrahim. Así es como recompensamos a los que hacen el bien. Él fue uno de Nuestros siervos creyentes. Y le anunciamos a Ishaq, profeta de entre los justos. (As-Saffat 37: 107 – 112)
Los versos coránicos anteriores dejan claro que Isaac no había nacido cuando ocurrió el incidente del sacrificio. Al contrario, las buenas noticias de su nacimiento fueron dadas después de este incidente. Era Ismael el único hijo del Profeta Abraham en ese momento.
Sin embargo, por desgracia, como una de las formas de discriminación contra el Profeta Ismael, la Biblia alega que fue Isaac quien sufrió el sacrificio junto con su padre, el Profeta Abraham. Es irónico que la Biblia haga unas afirmaciones que demuestran la falsedad de la afirmación anterior. En la Biblia, leemos:
Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí. Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré. (Génesis 22: 1-2)
Los versículos anteriores nos dicen que Dios ordenó al Profeta Abraham matar a su “único hijo”. Sin embargo, Isaac nunca fue hijo único. Es Ismael es el que había sido el único hijo de Abraham hasta que nació Isaac.
Suponiendo que el significado que se pretende es “el único hijo a quien ama Abraham”, no hay nada en la Biblia que indique que Abraham amó a su hijo Isaac en lugar de, o incluso más, que su hijo primogénito Ismael. Esto es solo una forma de discriminación contra Ismael en favor de Isaac.
Comentarios
El Islam es mucho más justo con el Profeta Ismael y sus descendientes. No discrimina en favor de ningún profeta ni de sus descendientes.
En cuanto a la discriminación bíblica en favor de Isaac y sus descendientes contra Ismael y sus descendientes, esto es infundado en el Islam. El Corán compara a menudo al Profeta Isaac y sus descendientes por un lado y al Profeta Ismael y sus descendientes por otro lado sin discriminación. En el Corán, leemos:
Decir: Creemos en Allah, en lo que se nos ha hecho descender, en lo que se hizo descender a Ibrahim, Ismail, Ishaq, Yaqub y a las Tribus, en lo que le fue dado a Musa e Isa y en lo que le fue dado a los profetas procedente de su Señor. No hacemos distinciones entre ninguno de ellos y estamos sometidos a Él. (Al-Baqarah 2: 136)
El Profeta Isaac y el Profeta Ismael son igualados en la medida en que Ismael es contado entre los antepasados de Jacob, aunque él era su tío en lugar de su padre. En el Corán, leemos:
¿Acaso estabais allí, presentes, cuando le vino la muerte a Yaqub? Cuando dijo a sus hijos: ¿Qué adoraréis cuando yo ya no esté? Dijeron: Adoraremos a tu Dios y al Dios de tus padres: Ibrahim, Ismail e Ishaq, que es un Dios Único; y a Él estaremos sometidos. (Al-Baqarah 2: 133)
El Corán nos dice que cuando el Profeta Abraham pidió a Dios que legara el liderazgo que tenía a sus descendientes, Dios se negó, explicando que algunos de ellos serían tan malhechores que no lo merecerían, fueran de los descendientes de Isaac o de los descendientes de Ismael, sin discriminación. Leemos:
Y cuando tu Señor puso a prueba a lbrahim con palabras que éste cumplió, le dijo: Voy a hacer de ti un dirigente y un ejemplo para los hombres.
Dijo: ¿ Y lo harás también con mis descendientes? Dijo: Mi pacto no alcanza a los injustos. (Al-Baqarah 2: 124)
También leemos:
Y así fue como enviamos a Nuh y a Ibrahim y pusimos en su descendencia la Profecía y el Libro. Entre ellos los hubo que siguieron la guía pero fueron muchos los que se desviaron. (Al Hadid 57:26)
En ninguna parte del Corán encontramos desaliento exclusivamente para los descendientes de Isaac (hijos de Israel), excepto a los incrédulos de ellos. Esto significa que el honor y la alabanza destinados a los descendientes de Abraham sigue aplicándose a los creyentes de los descendientes de Isaac y a los descendientes de Ismael. En el Corán, leemos:
Los hijos de Israel que cayeron en la incredulidad fueron maldecidos por boca de Daud y de Isa, hijo de Maryam. Esto les pasó porque desobedecieron y fueron más allá de los límites. (Al-Ma’idah 5:78)
Referencias:
- El Glorioso Corán
- La Santa Biblia
- st-takla.org
- blueletterbible.org