Los Profetas sufrieron las pruebas más fuertes
Por muy duras que sean nuestras pruebas, por muchas dificultades en las que nos veamos inmersos, por mucho que dure el confinamiento y muy dura que se nos haga esta situación, debemos saber que esas pruebas nunca serán como las que sufrieron y padecieron los Profetas, la paz sea con ellos. Los profetas, esos hombres a los que Allah había elegido y escogido por encima del resto; y a pesar de ello, los puso a prueba.
Así pues, no te entristezcas por lo que te ocurra, no desesperes por las pruebas que Allah te ponga, no caigas en la angustia y la desesperación; de hecho, alégrate por ello, pues has de saber que, como dijo el Mensajero de Allah, “cuando Allah ama a uno de Sus siervos, lo pone a prueba”. En consecuencia, las pruebas son una muestra del amor de Allah, y cuanto más te ama, más a prueba te pone. Y nosotros le pedimos a Allah que nos lleve al Jardín en la compañía de los profetas y los Auliyá. ¿Y cómo podemos aspirar a ello sin pasar por las pruebas con las que Allah pone a prueba nuestro Imán, sin transitar por el camino por el que ellos transitaron?
No olvidemos en ningún momento que esta vida es una vida de prueba en la que se diferencian los sinceros de los mentirosos, los creyentes de los incrédulos. ¿Acaso queremos contarnos entre los incrédulos? ¿Acaso queremos pertenecer al grupo de los falsos, los que no son sinceros en su Imán, esos que cuando les llegan las pruebas se derrumban y caen en la desesperación y la falta de confianza?
“Es verdad que ya probamos a los que les precedieron, para que Allah sepa (para que Allah os haga saber) quiénes son los sinceros y quiénes son los falsos”. (Surat Al Ankabut, 29:3)
El Mensajero de Allah dijo: “Y has de saber que lo que no te ha ocurrido jamás podría haberte ocurrido, y lo que te ha ocurrido nunca habría podido dejar de ocurrirte”. El que sepa y crea en estas palabras del Mensajero de Allah, que son una manifestación clara de que lo que Allah ha escrito para ti es lo que te va a llegar, que las pruebas, si Allah las decreta, han de ocurrirte, que se mantenga paciente antes las pruebas para obtener el bien que hay en ellas, la misericordia, la sabiduría que hay en ellas, pues en toda prueba hay un bien, por muy oculto que nos lo pueda parecer; que no las padezca con desesperación, que se vuelva a Allah con sinceridad, que Le pida con humildad a Aquel que es capaz de oír a una hormiga negra que camina sobre una negra roca pulida en una noche oscura, que te cubra con Su manto de aceptación y complacencia y que te haga aceptar las pruebas con confianza y perseverancia. Oh Allah, te pedimos que nos hagas ser de esos.
Basado en un discurso de Ahmed Bermejo