La responsabilidad de los musulmanes con la sociedad
Este post trata sobre la responsabilidad de los musulmenes con su sociedad.
En el último artículo, en el que hablábamos sobre la esfera social del Islam, acabábamos con un relato sobre unas palabras que pronunció Abu Bakr As Siddiq, que Allah esté complacido con él. Las repetiremos a continuación, como comienzo a este nuevo artículo:
En una ocasión Abu Bakr, que Allah esté complacido con él, en un jutba, dijo: “Oh gente, ciertamente vosotros recitáis esta aleya: ‘¡Vosotros que creéis! Ocupaos de vosotros mismos. Nadie que se extravíe podrá perjudicaros si estáis guiados’ (Surat Al Ma’idah, 105). Y al hacerlo, le dais un significado que no es realmente el suyo, pues yo he escuchado al Mensajero de Allah decir: ‘Si la gente ve algo reprobable y no lo cambia, poco falta para que Allah les castigue a todos’”. Este es realmente nuestro Din. Este es realmente el ejemplo de Muhammad. Es algo común, es colectivo, en el que todos colaboran para el bien y el crecimiento común.
Es fundamental que comprendamos esto de lo que estamos hablando: que nuestro Din es algo social, no individual. Todos y cada uno de nosotros debemos empaparnos de lo que realmente es nuestro Din para luego tener la capacidad de transmitirlo, en primer lugar, a nuestros hijos, a nuestras familias; pero no podemos quedarnos en eso únicamente, debemos hacer un esfuerzo para llegar más allá, debemos llegar a la gente que nos rodea. Esto es parte de nuestra responsabilidad como musulmanes de este tiempo.
La forma de hacerlo en primer lugar, el primer paso que debemos dar, es poner en práctica en nosotros mismos las cualidades, el comportamiento, el compromiso del Mejor de la creación; pero de una forma práctica, implantándolo en nuestras vidas, sin que se quede únicamente en palabras bonitas. Debemos llevarlo a la práctica, día a día, esforzándonos en ser mejores cada día, pues al hacerlo, aunque al principio pueda parecernos que no, al hacerlo, aunque sea muy sutilmente, estaremos transformando y mejorando nuestra sociedad.
Todos y cada uno de nosotros tenemos esta responsabilidad. Allah nos ha hecho Sus califas en la Tierra y, al hacerlo, ha puesto sobre nuestros hombros la responsabilidad de mejorarnos a nosotros mismos y a lo que hay a nuestro alrededor; y nunca, jamás, que nadie lo permita, pues si lo hace estará caminado por un camino muy oscuro, nunca podemos decir: “Yo ya he cumplido, yo hago mi oración y eso es suficiente para mí. Yo ayuno, mi mujer y mis hijos ayunan, y eso ya es suficiente; llevo a mis hijos a un par de horas a clases de Corán, y eso ya es suficiente; hago lo justo y necesario, y con eso ya he cumplido…”. El que piense de esta manera, el que crea que ya ha alcanzado la meta, el que crea que por hacer las cuatro cosas que hemos mencionado ya ha cumplido, que sepa que solo le queda ir hacia abajo, y lo peor de todo es que, en su descenso, arrastrará a los que le rodean.
Pero esto no es lo que queremos, si nos entregamos, si nos comprometemos, si cumplimos con nuestra responsabilidad, Allah nos ayudará y estará con nosotros. No penséis que este camino no lleva a buen puerto. Encontraremos dificultad, mucha. Tendremos que sobrepasar obstáculos, muchos; pero no dudéis de que Allah nos ayudará y que, si somos capaces de comprometernos y si realmente deseamos lo mejor para nosotros, para nuestras familias y para nuestra sociedad, entonces Allah nos abrirá todas Sus puertas, nos cubrirá con Su misericordia y nos hará ser de los triunfadores en esta vida y en la Próxima.