Originally posted 2019-04-25 09:05:43.
Las súplicas de Zacarías. Tres suras del Corán se refieren a las súplicas y rezos del profeta Zacarías (la paz sea con él). Cuando se hizo mayor, le pidió a Allah un sucesor que mantuviese la fe de su pueblo después de su muerte. Como era demasiado viejo para tener un hijo y su esposa era estéril, pidió a Allah de la siguiente manera:
“(3) Cuando llamó a su Señor en súplica escondida.
(4) Dijo: ¡Señor mío! Mis huesos se han debilitado y mi cabello ha encanecido y nunca, Señor, en lo que Te he pedido, he sido decepcionado.
(5) Temo por mis parientes cuando yo no esté; y mi mujer es estéril, concédeme de Tu parte un hijo
(6) que sea mi heredero y herede de la familia de Yaqub y hazlo, Señor, complaciente”.
(Sura 19: Mariam (María), aleyas 3-6)
(38) En ese mismo lugar, Zacarías invocó a su Señor, diciendo: “¡Oh Señor mío! Otórgame [también a mí], de Tu gracia, el regalo de una descendencia buena; pues, ciertamente, Tú escuchas todas las súplicas.”
(Sura 3: Al Imran (La Casa de Imrán), aleya 38)
(89) Y [así salvamos a] Zacarías cuando invocó a su Señor: “¡Oh Señor mío! ¡No me dejes sin descendencia! ¡Pero [aun si me dejas sin herederos, sé que] Tú permanecerás cuando todo lo demás haya desaparecido!”
(Sura 21: Al-Anbiya’ (Los Profetas), aleya 89)
Como ponen de relieve las aleyas aquí mencionadas, el profeta Zacarías invocó a Allah en privado. Éste es uno de los signos más evidentes de sinceridad. De hecho, Allah respondió a su súplica, que era de verdad sincera:
(90) Y le respondimos, concediéndole como regalo a Juan, después de haber hecho a su mujer capaz de concebir: [y,] en verdad, estos [tres] competían entre sí en hacer buenas obras, y nos invocaban con anhelo y temor; y eran siempre humildes ante Nosotros.
(Sura 21: Al-Anbiya’ (Los Profetas), aleya 90)
(7) [Entonces le llamaron los ángeles:] “¡Oh Zacarías! Te traemos la buena nueva [del nacimiento de un hijo cuyo nombre será Juan. [Y Dios dice,] ‘No hemos dado este nombre a nadie antes que a él.’”
(Sura 19: Mariam (María), aleya 7)
(39) En eso, cuando rezaba de pie en el santuario, le llamaron los ángeles: “Dios te anuncia la buena nueva [del nacimiento] de Yahya, que confirmará la verdad de una palabra procedente de Dios, y [será] excepcional entre los hombres, abstinente y un profeta de entre los justos.”
“Y los ángeles lo llamaron mientras permanecía en pie rezando en el lugar de oración: Allah te anuncia la buena noticia (del nacimiento) de Yahya, que será confirmador de una palabra de Allah, señor, casto, y de entre los justos, profeta”.
(Sura 3: Al Imran (La Casa de Imrán), aleya 39)
Según otra aleya, el profeta Zacarías sintió temor ante la idea de que se hubiese concedido un hijo a pesar de su avanzada edad. El ángel que Allah envió para darle la buena noticia de que iba a tener un hijo le recordó Su poder:
(8) [Zacarías] exclamó: “¡Oh Señor mío! ¿Cómo podré tener un hijo si mi mujer siempre ha sido estéril y yo he llegado ya a la vejez extrema?”
(9) [El ángel] respondió: “Así ha de ser; [pues] tu Señor dice; ‘Eso es fácil para Mí –tal como antes te creé de la nada.’”
(Sura 19: Mariam (María), aleyas 8 y 9)
Está claro que Allah responde a las oraciones y súplicas de Sus siervos y que Él es el único amigo y socorredor de las personas que le invocan de todo corazón. Siendo así las cosas, Allah concedió un hijo al profeta Zacarías, a pesar de que parecía algo imposible.